Demencia frontotemporal | Bruce Willis ya no puede leer ni hablar
Han surgido noticias desalentadoras sobre la salud del icónico actor Bruce Willis, quien fue diagnosticado con demencia frontotemporal en marzo pasado, una enfermedad sin tratamiento ni cura. Glenn Gordon Caron, guionista y amigo cercano de Willis, creador de la serie Luz de Luna que lo hizo famoso, reveló en una entrevista que Willis ya no puede hablar ni leer.
Emma Heming y Bruce Willis
Aunque Caron todavía puede reconocerlo, señaló que la comunicación con la estrella ha cambiado drásticamente. A pesar de que Willis puede identificar a las personas en los primeros minutos, ha perdido habilidades lingüísticas, como la lectura, que antes poseía. Según el guionista, Bruce sigue siendo Bruce, aunque sufre limitaciones en su capacidad verbal y de lectura.
La demencia frontotemporal es una enfermedad neurodegenerativa que afecta los lóbulos frontal y temporal del cerebro, con impacto en la personalidad, la conducta y el lenguaje. Es menos común que la enfermedad de Alzheimer, representando entre el 10 y el 20 por ciento de los casos de demencia. Los síntomas varían según la región cerebral afectada, pudiendo incluir cambios en la personalidad, conductas impulsivas y pérdida del uso adecuado del lenguaje.
Los expertos, como el doctor Lisandro Olmos y el doctor Arístides Duque Samper, destacan que la demencia frontotemporal se manifiesta en personas más jóvenes en comparación con el Alzheimer, y no se caracteriza principalmente por problemas de memoria. El doctor Oscar Rosas Carrasco, por su parte, subraya que esta forma de demencia ha sido conocida desde 1892 y puede afectar la comprensión y la comunicación.
La esposa de Bruce Willis, Heming Willis, compartió en una entrevista que la demencia es una enfermedad difícil tanto para la persona diagnosticada como para la familia. Glenn Gordon Caron expresó que, a pesar de ser una persona extraordinaria, la alegría de vivir se ha desvanecido en Willis.
Según la Asociación para la Demencia Frontotemporal, entre 50,000 y 60,000 personas en Estados Unidos padecen esta enfermedad, con causas que pueden ser hereditarias o inexplicables.
