Murió Silvina Luna, tras luchar 83 días por su vida

Silvina Luna, de 43 años, falleció el jueves en el Hospital Italiano, donde estuvo ingresada desde el 13 de junio. La modelo padecía de una insuficiencia renal aguda como consecuencia de una mala praxis en una cirugía estética realizada por el doctor Aníbal Lotocki en 2011. Además, esperaba un trasplante de riñón, el cual se retrasó debido a una infección que la llevó a estar hospitalizada por más de tres meses.
Flor de la V anunció la triste noticia en Intrusos, alrededor de las 13:48 del jueves. Visiblemente consternada, confirmó la información luego de hablar con el abogado de la modelo, Fernando Burlando. Minutos antes, Jorge Rial había proporcionado detalles sobre la salud de Silvina. “Todo lo que vamos a contar es esto, la decisión de la familia de desconectar a Silvina. Lamentablemente, esto acaba de ocurrir. Ahora está en manos de Dios, o lo que creas”.
Desde su ingreso al hospital, Silvina Luna permaneció bajo sedación y con respirador artificial hasta el jueves 29 de junio, cuando mostró una leve mejoría. Sin embargo, su estado de salud continuó oscilando entre mejoras y recaídas. El último informe médico oficial emitido por el hospital se remonta al 17 de agosto, y describía una evolución dentro de la gravedad del cuadro. “Se encuentra respirando por sí misma, recibiendo rehabilitación kinesiológica, nutricional y psicológica”, declaraba el parte. Sin embargo, Burlando expresó su preocupación el miércoles, afirmando que Silvina estaba librando una lucha incansable por su vida y recuperación.
El deceso de Silvina Luna impactó profundamente a sus amistades, seguidores y la comunidad artística. Desde que se conoció la gravedad de su situación, se convocaron cadenas de oración y se instó a donar sangre en una iniciativa que movilizó al público. Pequeños gestos de amor que surgieron de un caso que tocó a todos, debido a su juventud y a la injusticia de su muerte.
Su hermano Ezequiel, cuatro años menor, dejó su ciudad natal de Rosario para estar a su lado en Buenos Aires hasta el último momento. La relación entre los hermanos siempre fue estrecha, y se fortaleció en 2008 cuando perdieron a sus padres, Sergio y Roxana, con tan solo cinco meses de diferencia. Ezequiel incluso se ofreció como donante de órganos, aunque Silvina no estaba del todo convencida. “Algunos familiares se ofrecieron para donarme un riñón. Aún está por verse y no quiero adelantarme. Primero tengo que estar en la lista del Incucai. Uno de los que se ofreció fue mi hermano, pero todavía me resulta difícil hablar de eso. Sé que él está allí, pero muchas cosas dependen de esta situación”, compartió.
Los problemas de salud de Silvina Luna comenzaron después de una cirugía estética en 2011 a manos del médico Aníbal Lotocki, quien le inyectó biopolímeros en los glúteos, lo que desencadenó hipercalcemia e insuficiencia renal en su organismo. Por este hecho, el profesional fue condenado por el Tribunal Oral y Correccional N°28 de Buenos Aires a cuatro años de prisión y cinco de inhabilitación para ejercer la medicina, por el delito de lesiones graves, en una causa que presentaron conjuntamente Silvina, Stefy Xipolitakis, Gabriela Trenchi y Pamela Sosa.
Debido a esta situación, Silvina Luna esperaba un trasplante de riñón y mientras tanto, necesitaba someterse a diálisis tres veces por semana durante cuatro horas, ya que sus riñones habían dejado de funcionar. A principios de junio, compartió con entusiasmo que estaba comenzando el proceso para el trasplante, pero todo se retrasó por la infección. Este fue el inicio de una lucha de semanas que finalmente le costó la vida.
Nacida el 21 de junio de 1980 en Rosario, Silvina Luna saltó a la fama en la segunda edición de Gran Hermano en 2001. Fue finalista en el reality que coronó a Roberto Parra y abrió las puertas a la vida que siempre había deseado y a una carrera que la mantuvo en el centro de atención del mundo del espectáculo durante 20 años. En televisión, participó en programas como Son de fierro, La pelu y Las estrellas, y fue panelista en ciclos como Incorrectas y Flor de equipo, además de destacarse en Bailando por un sueño. En teatro, brilló en las revistas Coronados de risa… vivamos! y El champán las pone mimosas, así como en las comedias familiares Algunas mujeres a las que le cagué la vida y Abracadabra.
Su último proyecto fue en 2022, en la primera temporada de El Hotel de los Famosos, del cual tuvo que retirarse por sus problemas de salud. Fue en ese momento que el público realmente comprendió su situación y la asumió como propia, empatizando con su salud y deseando su recuperación. Elevando plegarias y buenos deseos hasta el final. Hoy, llora su muerte, prematura e injusta.