El cuñado de Pampita salió a pedir perdón, por agredir a un inspector estando alcoholizado | “Me duele profundamente”

Ahora, el cuñado de Pampita ha emitido una disculpa por el incidente.

El hermano de Roberto García Moritán, Francisco García Moritán, fue arrestado en las primeras horas del miércoles por conducir con un alto nivel de alcohol en sangre y agredir a un empleado de tránsito que lo detuvo para realizar un control.

En su comunicado, Francisco García Moritán expresó su más sincero arrepentimiento por su comportamiento y lamentó profundamente haber causado problemas a quienes se vieron afectados por sus acciones.

Extendió sus disculpas a todas las personas involucradas en el incidente, incluyendo a los agentes de control de tránsito que estaban cumpliendo con su deber.

También pidió disculpas a su familia, amigos y a la comunidad en general. Se comprometió a hacer todo lo posible para remediar la situación que él mismo provocó.

Además, Francisco García Moritán destacó que está cumpliendo con todas las instrucciones de las autoridades y aprecia la oportunidad de aprender y crecer a partir de esta experiencia. Agradeció a quienes le brindaron comprensión y el apoyo incondicional de sus seres queridos.

La escandalosa pelea con la policía

El incidente ocurrió en la Avenida Pueyrredón al 2500, en el barrio de Recoleta, cuando los agentes de tránsito le solicitaron que se detuviera para un control, y él reaccionó de manera violenta y negativa, lo que llevó a la intervención de la policía.

Diferentes testigos del hecho aseguraron que el hermano del legislador porteño explotó furioso al ser detenido y arremetió contra una mujer que estaba en el operativo. “Vos sos una mocosa con un trabajo raro, andate a la concha de tu madre, te vas a quedar sin laburo”, amenazó.

En medio del escándalo y los gritos de Francisco García Moritán, los agentes se dieron cuenta que el registro que entregó no estaba en el Sistema de Datos.

Por este motivo, lo trasladaron hasta una esquina, donde los gritos y amenazas continuaron. “Son unos negros de mierda, se van a quedar sin laburo”, fueron algunas de las palabras que escucharon los testigos.

Debido a la conducta y las irregularidades en la documentación, García Moritán fue trasladado a una comisaría y tuvo que declarar. Además, se abrió una causa por uso de documento público falsificado agravado, lo cual conlleva una pena de hasta 8 años de cárcel.

Asimismo, se abrió una causa por conducir con una cantidad de alcohol en sangre superior al límite permitido.

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